Paper Flowers ~Capítulo #12~

Besaba mi cuello con desesperación, sentía ardor al momento que hacía eso, yo forcejaba a que me dejara en paz, pero al parecer no me escuchaba.

Sus manos comenzaron a descender por todo mi torso, apretando con una mano mi pecho con fuerza, causándome dolor. Mis lágrimas acumuladas en mis ojos, cerré con fuerza mis ojos pensando en cómo salirme de esta. Mientras que el con su otra mano tocaba bruscamente mi feminidad.  Sentí como de pronto un dolor agonizante en mí. El había introducido dos de sus dedos, moviéndolos bruscamente, sintiendo como me partía en dos del dolor.

El gemía, jadeaba cada vez que hacía eso, mientras que yo lloraba gritaba para que me dejara en paz.

Introdujo otro dedo, sonriendo con malicia. Un dolor mucho más fuerte en mi se consumió. Al final se alejo de mí, con sus dos manos agarro mis pechos, comenzando a morderlos y besarlos. ¿Cuánto más sufrimiento iba a vivir?

De pronto, tomo un preservativo, pero al verlo me miro a mi, y lo tiro al bote de la basura. Al parecer no lo iba a utilizar. Secó su sudor de la frente. Para luego penetrarme salvajemente, el grito de placer, yo grite del dolor, sentí como un liquido en mi salió y era mi sangre, había sangre en mi. Mis lágrimas volvieron con más fuerza,  no podía creer lo que me ocurría.

Así estuvo penetrándome con salvajismo, hasta ya no poder más. Cayó un fuerte grito, se acostó junto a mí, con sus ojos cerrados y sus labios entre abiertos. Yo lo vi con despreció odio. Quería irme ya de ahí pero no podía. Un dolor en mi vagina, un dolor terrible, vi como las sabanas estaban manchadas de semen y de mi sangre. Yo solo cerré mis ojos para no vomitar.

Espere para que ese dolor desapareciera pero no era así. Cada vez me dolía más y más. El se quedo dormido, mientras que yo aun lloraba por lo que acababa de ocurrir.

Pasaron horas y vi el reloj que se encontraba en la mesita de noche a lado mío, y vi que marcaban las 6 de la mañana.

El se despertó y me voltio a ver, se levanto y comenzó a vestirse.

  - Vístete rápido – me ordeno con enojo

Yo no conteste no tenía voz en ese momento un nudo en la garganta se apoderaba de mí.

 - Dije vístete que no escuchas – me grito

 - No puedo – dije en un hilo en voz

 - ¿Cómo que no puedes? – me pregunto con curiosidad

 - No puedo, me duele mucho – llore con más ganas

El me miro con tristeza más no hizo nada. Termino de vestirse y salió del cuarto pero sin antes decir.

 - Te veo en la noche – dijo con picardía 

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Gracias chicas por sus comentarios :) Hello vacations, goodbye school